Norwegian Wood: I thought of that while riding my bike.

Alguna vez un ciclista con más de 30 años experiencia y más de 30,000kms. recorridos me dijo que jamás había visto reventar un chicote de la bicicleta. Para los que no lo sepan los chicotes son los cables que conectan a los frenos y cambios a sus respectivas palancas de accionamiento.

Lo curioso de este comentario es que el miércoles al estar haciendo una ruta nueva de montaña con unos Uruguayos desconocidos pero requete amables, el Oncol Airo rompió el chicote del freno trasero, ahí se acabo el paseo. Ya con su bicicleta arreglada salimos ayer con destino a la caseta de la carretera México-Cuernavaca donde a la altura de Luis Cabrera, yo reventé el freno trasero, decidimos continuar el camino a pesar de la falla y la lluvia.

Como era de esperarse alcanzamos nuestro objetivo, descansamos un poco para admirar la vida de los viajeros que hacían fila para pagar y emprendimos el regreso. Para nuestra buena suerte, la lluvia nos hizo de las suyas de nuevo mientras avanzabamos ente los coches por la Calzada de Tlalpan cuando de pronto se escucha un chasquido metálico...mi chicote delantero había dado su último estirón.

Fue así como acabamos parados en Calzada de Tlalpan esquina con Taxqueña durante 1hr bajo un puente para no seguir mojandonos, esperando a que fueran a rescatarnos. Y para cerrar con broche de oro, la llanta de atrás del Airo se pinchó misteriosamente mientras esperábamos...vaya suerte!